3.10.07

Paradojas en la Isla de la Bayamesa, o Reflexiones acerca del tiempo y los pecados

El tiempo cura las heridas, dicen por ahí. El perdón es virtud, dicen otros. Pero hay veces que la combinación de ambas da como resultado extrañas paradojas, que según como se lean, pueden tener un sentido u otro. Según informa El País, en un hospital de Cuba ha sido realizada una complicada operación para devolverle la vista a un paciente ciego. Esto no es un logro significativo, ya que es una operación que se lleva efectuando desde hace tiempo con éxito (en pacientes con susceptibilidad de éxito, no en ciegos totales), pero si lo es que ha sido de forma gratuita, ya que forma parte de un programa cubano para devolver la vista a toda Sudamérica (véanse las connotaciones políticas con una forma de "ver" concreta). Hasta ahí bien, todo correcto. Lo paradójico del tema es que el paciente en cuestión es el sargento boliviano Mario Terán, célebre precisamente por ser el hombre que mató a Ernesto Guevara De la Serna, El Ché Guevara. Y para más inri, se hace pública esta noticia cuando se cumple el 40ª Aniversario del hecho, concretamente el 9 de octubre. "Cuatro décadas después de que Mario Terán intentará destruir un sueño y una idea, Che Guevara regresa para ganar otra batalla. Ahora un anciano puede apreciar de nuevo los colores del cielo y el bosque, disfrutar de las sonrisas de sus nietos y ver partidos de fútbol", decía el diario oficialista Granma. Una lectura puede ser que, a pesar de acabar con un sueño de revolución de una manera fría y asesina, Cuba perdona, y encima le devuelve la vista a su verdugo. Bondad, perdón y redención. Pero no todo es tan bonito y floreado. Una de las doctoras que intervino en la operación se enteró por la radio de la identidad real del paciente, tiempo después, y no se alegro precisamente. La propaganda vende un hecho, pero la realidad escama a gran parte del pueblo. Quizá también hace cuarenta años la propaganda vendía tan bien como ahora. Las verdades se esconden en el tiempo, que a la vez es dueño y señor de los mitos. Una combinación que da que pensar.

Fotografía del Che, tendido muerto, con los militares que lo encontraron.

No hay comentarios: